Introducción
Nuestra labor como
docentes se debe fundamentar en formar no solo buenos trabajadores sino también
buenas personas es decir no solo busca aprendices productivos y competitivos
sino que también tengan muy buena calidad humana. Promover que el aprendiz sea innovador y
tenga creatividad con el fin de encontrar solución a problemas que se encuentre
en el quehacer diario, además una de las estrategias es que el instructor sea
mediador en la resolución de problemas.
Análisis
La enseñanza debe ser teórico práctica, buscando es que el aprendiz aprenda
haciendo teniendo en cuenta como se mencionó anteriormente la parte humana y
productiva porque se convierte en una necesidad no solo a nivel nacional sino
internacional.
Estos principios educativos y pedagógicos están basados en las necesidades
reales no solo de Colombia, sino también en las necesidades del mundo
actual. Debido a esta razón, en los aprendices
se desarrollan las competencias necesarias en lo teórico, en lo científico, en
lo práctico y en lo humano; las cuales son indispensables para el desempeño de éstos
en un mundo globalizado.
Al referirse a un aprendiz globalizado y en contexto con la actualidad
mundial y que necesita ser un verdadero actor representativo en la sociedad, se
hace indispensable su integralidad en lo que como anteriormente se mencionó, se
incluye el ser, pero a su vez se incluye un factor fundamental en la sociedad
actual y es la gestión tecnológica y las TIC’s.
Por tal motivo, el aprendiz requiere contextualizarse con los nuevos
ambientes informáticos y utilizarlos para su formación y para la inclusión de
su formación en la aplicación en la sociedad.
Argumento
Cabe aclarar que para lograr dichos principios es necesario que el
instructor conduzca a sus aprendices hacia la exploración de su ser y del
entorno para guiar su proceso formativo en cuanto a la real necesidad de un
mundo sin fronteras y para tal efecto se requiere de la apertura de mente, del
rompimiento de paradigmas y de la investigación basada en la experimentación.
En este proceso el aprendiz, como protagonista de su proceso formativo
requiere del aprendizaje autónomo como gestor de su exploración y
profundización en la temática objeto de estudio. Como base de tal aprendizaje, la indagación
se convierte en el eje central de su proceso educativo, llevando
consecuentemente a la formulación de hipótesis y cuestionamientos, los cuales
solo con la teorización argumentada y con la experimentación podrán ser
resueltos, llevando consigo al hallazgo de respuestas no de una manera
magistral y sobre estructurada y/o memorística, sino respuestas razonables,
analizadas y argumentadas acerca de la cotidianidad de su ser y de su qué hacer
productivo.
De esta manera, el aprendiz se convierte en gestor de su conocimiento y
aplicación en la sociedad, siendo ésta última el eje de circulación de los
individuos y de aplicabilidad de un sinnúmero de conocimientos y prácticas que
la hacen resurgir permanentemente y aceleradamente.
Ejemplificación
En mi labor como Instructora SENA, dicho planteamiento, hace entender que
el aprendiz SENA desarrolla su ser para ubicarse en la sociedad y por tal
razón, su formación no puede descuidar el aspecto social, los valores y
principios de la integralidad del ser que lo hacen participante activo del
beneficio de la sociedad y en ese aporte al entorno se requiere de la
convivencia con los demás, con el medio y recursos que lo rodean.
Todo esto lleva a inferir que el modelo pedagógico SENA está basado
principalmente en la realidad, en las necesidades básicas y específicas del
sector productivo que cada día necesita complementar la manufactura y/o
servicios con la investigación, con el humanismo, con el medio ambiente y con
la tecnología; claro está, sin olvidarse del contexto teórico-científico.
En esta evolución de la educación se introduce un concepto llamado
innovación en la formación, donde se exploran diferentes metodologías de
aprendizaje de acuerdo a la temática y a la real necesidad de los diferentes
sectores productivos.
Por todo lo anterior, se puede afirmar que el aprendiz SENA puede construir
por sí mismo, la adquisición de sus competencias, ya que está en la capacidad
de analizar y experimentar conceptos teóricos e históricos y a partir de ello
profundizarlos, mejorarlos y llevarlos de una manera acoplada a las reales
necesidades de la sociedad.
Conclusión
El rol de aprendiz no debe
ser el de ser un simple receptor de conceptos ya experimentados y asimilarlos
por simple convicción y fe, sino involucrarse en su análisis, cuestionándose y
extrayendo sus propios conceptos, bien sea para reafirmar los ya otorgados o
para darle nuevos y más amplios horizontes en cuanto a su teoría y/o aplicación
en un mundo divergente. De ahí la
necesidad de crear entornos de aprendizaje donde el aprendiz sienta la
confianza necesaria para reflexionar, ser crítico y tomar decisiones acordes a
su formación; por lo que los ambientes de aprendizaje se convierten en la
maqueta a escala de lo que a futuro será la realidad del entorno laboral y
productivo del aprendiz